En breves días, el Mercado Bilbaíno de Otxarkoaga, se convertirá en el primero del Estado en incorporar paneles solares verticales en su fachada, marcando un hito en la implementación de energías renovables. Con una superficie total de 276 metros cuadrados en la parte externa y 440 metros cuadrados sobre la cubierta de la plaza Ángela Arregui, se estima que esta iniciativa permitirá al mercado reducir su consumo de energía en un 45%, según las previsiones del Ayuntamiento de Bilbao.
El proceso de instalación se llevará a cabo en un período de dos o tres semanas, según las estimaciones del consistorio bilbaíno. La instalación fotovoltaica no solo contribuirá al ahorro de energía, sino que también evitará la emisión de aproximadamente 28.110,3 kg/año de CO₂, equivalente a la tala de 4.935 árboles anualmente.
El Mercado del Ensanche también se unirá a la tendencia solar, instalando dos sistemas independientes sobre su cubierta, con la expectativa de un ahorro energético del 47%. La iniciativa en el Ensanche contribuirá a reducir las emisiones de CO₂ en 45.601,08 kg/año y evitará la tala de 7.101 árboles anualmente.
Ambos mercados, en conjunto, alcanzarán una superficie total de 1.616 metros cuadrados de paneles solares, operando en modo de autoconsumo con excedente acogido a compensación, lo que implica que la energía adicional se volcará a la red, generando así una compensación en la factura eléctrica.
La energía sobrante del Mercado del Ensanche se distribuirá a los Mercados de Deusto y Trauko, mientras que la instalación de Otxarkoaga suministrará electricidad a los Mercados de Labayru y La Ribera. Estos esfuerzos no solo subrayan el compromiso de Bilbao con la sostenibilidad, sino que también contribuyen a establecer una red de energía compartida entre los distintos mercados de la ciudad.
Desde una perspectiva medioambiental, estas instalaciones se consideran un paso más hacia los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero a largo plazo establecidos por el Ayuntamiento. Se busca alcanzar un ahorro de energía del 31% para el año 2030, junto con la promoción e implantación de energías renovables, que deberán representar el 32% del total. Estos esfuerzos se enmarcan en una serie de compromisos, incluida la reducción del 40% de las emisiones de gases de efecto invernadero con respecto a 1990 para el año 2030.
Fotos Mediaset
