Un operario de las obras de la Línea 3 de Metro Bilbao ha fallecido hoy al caerle un cascote mientras trabajaba en el tramo entre el Casco viejo y Txurdinaga. Al parecer, la piedra, de unos diez centímetros, se ha desprendido desde una altura de cuarenta metros y ha roto el casco del operario, provocándole una fractura craneal que ha resultado fatal. El hombre, que trabajaba para una empresa externa a Metro Bilbao y cuyas iniciales son E.B.B, se encontraba en la parte inferior de uno de los futuros ascensores del suburbano, estaba protegido por una red que podría haberse roto por la velocidad tomada por el cascote en su caída, según ha informado Euskal Trenbide Sarea.

Según han informado fuentes de ELA, el trabajador pertenecía a una subcontrata de una UTE -Unión Temporal de Empresas- adjudicataria de las obras del metro. Según fuentes de LAB, la empresa a la que pertenecía el trabajador es Estructuras Cosvimar. ELA ha destacado que se trata de una obra pública, cuya ejecución «se había subcontratado en cadena», y ha señalado que el gestor ferroviario ETS es también promotor de las obras del Tren de Alta Velocidad, en las que «falleció hace poco otro trabajador en Tolosa», según ha puesto de manifiesto.

ELA ha denuncuado que los trabajadores de las subcontratas constructoras que están ejecutando obras públicas promovidas por ETS «están trabajando en condiciones precarias y con jornadas de trabajo interminables». A su juicio, «la principal responsable» de lo ocurrido es ETS y el departamento de Transportes del Gobierno vasco, que «en las adjudicaciones de las obras públicas -ha afirmado ELA- hacen dejación de su responsabilidad de velar por el cumplimiento de las normas de seguridad».

También el sindicato LAB ha criticado que las Administraciones públicas «no sólo no garantizan» la salud de los trabajadores, sino que «son ciegas, sordas y mudas ante las malas prácticas y el incumplimiento empresarial». Según ha indicado la central abertzale en una nota, «en casi todas las grandes obras ha habido muertes obreras como en la Supersur o en las obras del tren de alta velocidad y ahora en el metro».